lunes, 18 de febrero de 2008

Yoco y Pocki llegan al Árbol Parlanchín

Llegaron al Árbol Parlanchín y miraron si estaba despierto o dormido para irse corriendo o no. Estaba dormido, pero al pasar Pocki, tropezó con una raíz y el árbol se despertó y con cara de mal genio dijo:
- ¿Quiénes sois?
- Éste es mi amigo Pocki, un duende, y yo soy Yoco, el dragón.
- ¿Qué queréis?- les preguntó el árbol.
- Queremos pasar para llegar hasta la Esmeralda Cristalina de la Hierba Maldita, pero no podemos hacerlo con tus ramas.
- Pues si queréis pasar debéis realizar varias pruebas.
- De acuerdo- dijeron Pocki y Yoco.
- Pues allá vamos. La primera es que tenéis que hacerme reír.
Pocki le dijo a Yoco que le contase un chiste o le hiciese cosquillas.
Yoco pensó un poco y empezó:
"¿Qué le dice una gamba a otra?No se puede mostrar la imagen “http://ldp.nedmirror.nl/linuxfocus/common/images2/article329/gamba.png” porque contiene errores.
Estoy preocupada.
¿Por qué?
Mamá hace tiempo que se fue a un cóctel y aún no ha vuelto."
Entonces el Árbol Parlanchín empezó a reírse tan fuerte que las raíces retumbaban y hasta hacían saltar a los dos amigos.
- Muy bien habéis hecho que me ría. Aquí va la segunda prueba: tenéis que encontrar un trébol rojo de cuatro hojas. Por aquí hay muchos, pero yo no puedo moverme.
- Pues, Pocki, ¡manos a la obra!- exclamó Yoco.
Mirando, mirando por todos lados del bosque, no encontraban ninguno pues costaba trabajo encontrar uno de cuatro hojas y encima rojo. Por fin lo encontraron encima de una roca, que era también de color rojo como la sangre.
- Bueno, Pocki, vuelta atrás para dársela al árbol.
Volvieron y se la entregaron.
- Muy bien, lo habéis conseguido. Aquí va la tercera prueba: tenéis que resolver dos adivinanzas.
Primera: "¿Qué nombre de animal contiene las cinco vocales?"
Yoco dijo:
- ¡Yo la sé! Es el murciélago.
-Muy bien, la has acertado. La segunda adivinanza: "Es una fruta muy jugosa, se come en verano, empieza por h y termina en era"
- Pocki saltó:
- ¿Es la higuera?
- Muy bien, prueba conseguida. Ya sólo os queda la última: tenéis que hacerme callar.
Empezó a hablar:
-No se qué, no sé cuánto, blablabla... ¡Hablaba hasta por las hojas!
Mantuvo una laaarga conversación sobre la esmeralda, hasta que Yoco se hartó y se tapó los oídos.
- ¿Quieres callarte ya?
- No puedo callarme porque soy parlanchín, así que hablaré, preguntaré, gritaré y exclamaré hasta que consigáis callarme.
Primero le taparon la boca, pero nada, no se callaba. Después hicieron una hoguera, pero el árbol se puso a gritar:
- ¿Socorrooooo, socoooorro!
Es decir seguía hablando. Yoco cogió un hacha y le gritó:
- ¡O te callas o gragggggg!
Yoco no tenía intención de hacerle daño sólo quería asustarlo y que se callara de una vez.
Entonces el árbol, por fin, dijo:
- Vale, me callo, lo habéis conseguido, os ayudaré. En una de mis ramas hay un botón, apriétalo y podréis pasar.
Empezaron a buscar y buscar hasta que Yoco gritó:
- ¡Ya lo he encontrado! ¡Ya lo he encontrado!
Lo apretaron y las ramas se separaron y pudieron pasar. Se despidieron del Árbol Parlanchín y ...