que es muy bonita
y cuando hace calor,
sale a tomar el sol
que a ella le gusta
más que mogollón.
Elena
n
Yo me fui a las grandes playas
de Mar del Plata.
Aguas cristalinas
donde se bañan las sirenitas.
Yo estaba con los delfines...
¡Fue un sueño que yo tuve!
Mª Isabel
n
Había una mariposilla
que se posó en una florecilla.
- ¡Qué maravilla!-
dijo impresionada la chiquilla.
También la vio una ardilla.
Otra se posó en una hoja amarilla.
Paula Nogales
n
¡Una mariposa!
siendo rosa.
¿quién la quiere?
El que la viere.
¡Qué poco ruido!
¡Y qué colorido!
Gonzalo
n
Ayer cuando me fui a comer,
me mintieron, qué le vamos a hacer.
Por la tarde jugando al parchís,
me acordé de ti.
Y por la noche cuando me acosté,
me puse a leer.
Manolo Larios
n
-¡Hola chiquilla!
-¿Vas a Sevilla?
- Sí, me llamo Mariquilla
pero estoy mala y me han traído en camilla.
-¡Pobrecilla!.
Te regalo esta mariposilla.
Mar
n
Llega el Otoño y se lleva las rosas.
Se va el verano con las mariposas.
No veré más flores florecer,
hasta que sea Primavera otra vez.
Después llega el Invierno frío
que del Otoño es el tío.
Paula Rodríguez
n
En el azul cielo, vuelan los ruiseñores
que asombran a los señores.
A un señor que los vio les encantó.
Y él mismo se preguntó
dónde se encontraba.
¡En Sierra Nevada!
Alejandro Rodríguez
n
Un buen día, me encontré con una ardilla
que hablaba y andaba de maravilla.
Ese mismo día un elefante, un tren conducía,
¡menos mal que no se rompió la vía!
Cuando llegué a mi casa sólo vi
a mi madre que decía: -¡despierta Serafín!
Malena
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